Seleccionamos un grupo de personas que consideramos afines entre sí en intereses, valores y búsquedas. Se trata de una curaduría de grupos de individuos de diferentes disciplinas, para que la convivencia aporte y estimule a nuestros invitados.
Deseamos ofrecer el ambiente propicio para que puedan construirse lazos profundos al conocer y compartir con otros seres comprometidos. Así, tejer redes humanas es uno de los ejes centrales de nuestros esfuerzos.
Trabajamos personalmente con los invitados, previo a su llegada, a través de correspondencia con documentación informativa, entrevistas individuales para aproximarlos a los proyectos y posibilidades locales. La finalidad de esto es acompañarlos a que su tiempo en San Pancho se aproveche de la mejor manera y con gran efectividad.
Buscamos un equilibrio entre los tiempos propios y los compartidos del programa de actividades.
Asimismo, bajo demanda, ofrecemos prácticas de yoga, meditación, visualizaciones, caminatas, terapias corporales, ejercicios de reconexión espiritual con sonido, movimiento, color, aroma, etc. Recomendamos ejercicios que promueven el despertar de procesos creativos: escritura, pláticas, asesorías, revisión de portafolios y visitas de estudio.
Es requisito participar en alguna actividad de vinculación y retribución a la comunidad local. Éstas incluyen talleres, clases, charlas, conferencias, laboratorios de creación, seminarios, conciertos, representaciones, exposiciones, proyecciones y otros.
¿Cómo lo logramos?
A través de la vinculación de los artistas residentes con la comunidad en la que estamos insertos, generando posibilidades de respuesta a necesidades comunitarias concretas. Facilitamos la comunicación mediante el uso de herramientas, espacios y tiempos disponibles para los diferentes procesos creativos.
Potenciando la creatividad y el desarrollo artístico por medio de la convivencia, la colaboración, el diálogo y propiciando el trabajo en conjunto entre disciplinas diferentes.
Se trata de un espacio de escala y carácter íntimo. Nos enfocamos en el individuo, promoviendo la sensación de contención y bienestar, para potencializar dinámicas de proximidad y empatía entre las personas, a través de experiencias transformativas.